Un apartamento espacioso, limpio y confortable, todos los sevicios cerca y bien ubicado en la Manga. Sobresaliente en la comodidad de los colchones y el sofá del salón, que se convirtió en el refugio familiar en los días tormentosos.
Resaltar la comunicación con el propietario y con Carmelo, el conserje, siempre dispuesto ante cualquier cosa que pudiera surgir.